La clasificación proporciona una estructura para la competición. Los atletas que compiten en los deportes Paralímpicos tienen una discapacidad que les lleva a una desventaja competitiva. Por consiguiente, se ha establecido un sistema para reducir al mínimo el impacto de las discapacidades en el rendimiento deportivo y asegurar que el éxito de un atleta está determinado por la habilidad, la aptitud, la potencia, la resistencia, la capacidad táctica y la concentración mental. Este sistema se denomina clasificación.
La clasificación determina quién es elegible para competir en un deporte Paralímpico y agrupa a los atletas elegibles en clases deportivas de acuerdo a su limitación en la actividad de un deporte determinado.
El Movimiento Paralímpico ofrece oportunidades deportivas a los atletas con discapacidades físicas, visuales y/o intelectuales que tengan al menos una de las siguientes 10 discapacidades elegibles: disminución de la potencia muscular, disminución de la amplitud de movimiento pasiva, discapacidad de las extremidades, diferencia de longitud de las piernas, baja estatura, hipertonía, ataxia, atetosis, discapacidad visual y discapacidad intelectual.
Los sistemas de clasificación difieren según el deporte y son desarrollados por las Federaciones Internacionales (FI) que rigen el deporte. Las FI también se encargan de revisar el sistema de vez en cuando
Las FI deciden qué impedimentos elegibles aplicará en su deporte. Algunos deportes paralímpicos sólo están diseñados para atletas con un tipo de discapacidad elegible. El golbol, por ejemplo, solo lo disputan atletas con una discapacidad visual. Otros deportes, como el atletismo y la natación, están abiertos a atletas con cualquiera de las 10 discapacidades elegibles.
Las Federaciones Internacionales también deciden qué tan severa debe ser una discapacidad para que un atleta sea elegible para ese deporte. Para que un atleta sea elegible la discapacidad debe ser lo suficientemente severa como para tener un impacto en su rendimiento deportivo. Esto es llamado ‘Criterio Mínimo de Discapacidad’. Si un atleta no cumple con ese Criterio Mínimo de Discapacidad, no se cuestiona que la tenga o no. Simplemente significa que ese deportista no cumple con las normas de elegibilidad para competir en un deporte determinado bajo el Reglamento Deportivo de la Federación Internacional.
Dado que diferentes deportes requieren diferentes habilidades, cada deporte lógicamente requiere su propio sistema de clasificación. Por ejemplo, una discapacidad en los brazos afecta el rendimiento en un evento de atletismo en menor medida que el rendimiento en un evento de natación.
Para más información sobre la clasificación, por favor diríjase a la página de clasificación.